CRISTIAN RABASA – Esta tarde apareció la virgen que había sido colocada dentro del monumento a San Martín hace casi 70 años y de esta forma se confirmó que no era un mito aquella leyenda que pasó entre varias generaciones de trenquelauquenses – Ahora seguramente se abre un nuevo debate sobre el destino de la pequeña estatuilla de la virgen de Fátima